Mensajes diarios

LECCIÓN 291

Éste es un día de sosiego y de paz.

Hoy la visión de Cristo contempla todo a través de mi. Su vista me muestra que todas las cosas han sido perdonadas y que se encuentran en paz, y le ofrece esa misma visión al mundo. En su nombre acepto esta visión para mi, así como para el mundo. ¡Cuánta hermosura contemplamos en este día! ¡Cuánta santidad vemos a nuestro alrededor! y se nos concede reconocer que es una santidad que compartimos, pues es la Santidad de Dios Mismo.

Mi mente se aquieta hoy, para recibir los Pensamientos que Tú me ofreces. Y acepto lo que procede de Ti, en lugar de lo que procede de mi. No sé cómo llegar hasta Ti. Mas Tú lo sabes perfectamente. Padre, guía a Tu Hijo por el tranquilo sendero que conduce a Ti. Haz que mi perdón sea total y completo y que Tu recuerdo retorne a mi.

Un Curso de milagros

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Yo soy el Ángel de tu Misión

Desde el día que tú naciste, he estado junto a ti accediendo a tu alma, despertando tu interés y explicándote con cariño… por qué estás aquí. Te he conducido con ternura hacia las necesidades humanas… condiciones mundanas donde tú puedes servir. Trata de hacer memoria. Siempre he puesto ante ti la misma situación… ¿Recuerdas que desde niño has tenido la oportunidad de ayudar, consolar y dar algo de ti? Pues he sido yo quien te susurraba con dulzura para que captaras mis mensajes.

Porque así trabajamos los ángeles, esa es nuestra función. Ante cada ser humano presentamos la escena donde debe cooperar… donde debe cumplir su misión especial. Si su trabajo es con ancianos… en su casa deberá empezar. Con discapacitados… habrá una silla que empujar. Si es con enfermos… siempre tendrá la ocasión.

Lo mismo sucede si es con niños su tarea. Sin olvidar que es esencial ayudar con la oración. Otras veces, su labor consiste en instruir o transmitir esto mismo que te transmito yo. La forma en que auxilias es de importancia vital. Debe ser con bondad, sin importar credo, color o edad.

Todos tenemos algo que hacer para crecer… y yo también tengo una misión… y mi misión, cariño mío, eres tú. Ahora, ven… ven a volar conmigo. Cierra los ojos… aspira mi luz divina que es reflejo del amor de Dios. Vamos a planear sobre el día… a ver a quién ayudamos hoy...

Quiero que permanezcas siempre así, dejando que yo te mime, que te proteja, que te ame, durante toda la eternidad…

Estoy en tí, tu estas en mí, SOMOS UN SOLO SER…..

Con Amor en mi corazón

Agenda Angelical de Lucy Aspra AUTOR LUCY ASPRA

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Afirmacion diaria
Se me hace fácil defender mis puntos de vista. Louise Hay